Músico y compositor. Nació en Madrid, el 21 de abril de 1901.
Desde niño dio muestra de predisposición por la música. Estudió en el Conservatorio de su ciudad natal, y fue alumno de Conrado del Campo. Formó parte de círculos artísticos e intelectuales como el Grupo Madrid, en 1930, que rechazaba la estética wagneriana.
Compuso el ballet Juerga, que estrenó en la Ópera Cómica de París nuestra Antonia Mercá “La Argentina” y en 1929, Don Perlimplia, ópera basada en García Lorca, e Interior, sobre texto de Mauricio Matterlineck. Julián Bautista obtuvo en dos oportunidades el Premio Nacional de España para compositores por sus dos cuartetos de cuerdas, el Op. 6 y el Op. 8, y también el primer premio del Concurso Internacional de Unión Radio de Madrid.
Así mismo fue nombrado catedrático del Conservatorio Nacional de Madrid en 1908, y al año siguiente en Valencia, formo parte del Consejo Central de la Música. Los problemas políticos ocasionados por la lucha civil lo obligaron a trasladarse a Buenos Aires, en 1940.
Desde su radicación se dedicó a la enseñanza y a la creación. Compuso obras netamente hispánicas como La fantasía española, (1945); los Cuatro poemas gallegos (1946), el Cuntar del Mio Cid (1947), La Sinfonía breve (1956), la importante obra coral Romance del rey Rodrigo (1956), para coro “a capella”, y al año siguiente su Sinfonía rico diana o Tercer Cuarteto de Cuerdas, queda como reflejo de la labor que supo transmitir a sus alumnos intelectuales como Victoria Ocampo, Alberto Cirnastero cubanos, Pedro López Lagar. Luisa Beicon los que por menor medio de sentencias humorísticas llenas de picardía dedicó años a la música para el cine desde “La maestrita de los obreros”, de Zavalía, con Delia Garcés, Orestes Caviglis y Oscar Valicelli, “Concierto de almas”, con Garcés y López Lagar, “Cuando florezca el naranjo”,“Juvenilia”,”La casa de muñecas”, “Nuestra Natacha”, de Julio Saraceni, con Amelia Bence y Esteban Serrador, “Los árboles mueren de pie”, con García Buhr y Amalia Sánchez Ariño, y tantísimas otras que forman la gran historia del cine nacional.
Eran los tiempos en que el cine ayudaba a vivir a muchos de nuestros compositores. Fue nombrado académico de número de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de la Argentina. Cuando Pablo Casas ofreció a Juan José Castro la dirección del Conservatorio de San Juan de Puerto Rico, el último maestro designó a Bautista como profesor de composición, tarea que desempeñó poco tiempo, porque falleció en Buenos Aires, estando de vacaciones, el 8 de julio de 1961. Casó con Adela Fuchs, mujer de inquietante elegancia y femineidad, que durante años embelleció las páginas de “La Nación”, con sus diseños de modas. Bautista dejó en la Argentina más de media docena de discípulos, tanto en la música clásica como en la popular: Valdo Sciamarella, Carlos Pemberton, Osvaldo Pugliese y Atilio Stampone, entre otros.