Cuando el arte muta a favor de la persona
El arte instalación es un concepto no tan nuevo como se cree. Surgió en los años 60 de la mano, ni más ni menos, de Marcel Duchamp. Es un concepto que lleva al arte a adoptar formas, luces, sonidos, a plasmarse en las paredes, etc… Es un concepto que nos viene a enseñar que el arte y las obras pueden mantener su esencia, su identidad original, pero a la vez mutar. El arte instalación viene a demostrarnos que el arte puede ser una experiencia sensorial, perceptual en la que el arte muta a favor y según la persona.
Definición y tipos
El arte instalación es también conocido como arte efímero. ¿Por qué es efímero? Justamente por eso porque tiene una realidad, espacio y tiempo específicos. Para producir un arte instalación el artista parte de un concepto o una idea que desea transmitir. A veces, esa idea es disparada por el lugar natural donde se va a producir la instalación, como es el caso del “Teatro de los mineros de carbón” del artista Julio Hernández en Chile, o cuando se da en un lugar natural y el arte instalación se realiza al aire libre. En este caso recibe el nombre de land art. Ya sea por una idea a representar o por un ambiente natural, el artista busca plasmar con objetos y todo tipo de ayudas visuales ese concepto y generar, por sobre todo una experiencia inmersiva.
El espectador queda sumergido en la obra, la recorre, la camina, se mueve en ella. Tiene que mirar de frente y para todos los costados. Para arriba y para abajo. A veces caminar, subir y bajar. El artista puede valerse del uso de medios audiovisuales, fotografía, luces, sonidos, olores, agua, etc….
Marcel Duchamp
Se dice que Marcel Duchamp fue uno de los pioneros en este arte. ¿Por qué? Bueno, básicamente por que él fue el primero en plantear que un objeto puede ser una pieza de arte que muta según la visión y la interpretación del espectador. Allí por los años 60 no existía el despliegue de medios audiovisuales que existe hoy, ni la tecnología. Pero Marcel Duchamp mostró que la obra puede ser disruptiva. Que objetos impensados pueden llegar a los pasillos de una sala o de un museo y hacernos parte y hacernos pensar.
Existen grandes obras instalacioncitas a lo largo de todo el mundo, que son recorridas por miles de personas y que incluso viajan por todo el mundo. Cabe mencionar alguna de ellas:
“Embankment “de Rachel Whiteread
Rachel Whiteread es una artista británica de unos 60 años. Es fotógrafa y escultora e introduce un concepto único, que es el de crear moldes de objetos, chicos o grandes, para representar el espacio vacío. Una de sus más emblemáticas obras es Enbankment. Para esta obra la artista realizó mas de 14.000 cubos en polietileno traslúcido que fue apilando. El concepto que busca transmitir con esta obra es la sensación de aparente orden coexistiendo con el caos que se sucede en las ciudades. Como una obra en construcción. Enbankment busca hacernos tomar conciencia de la particular forma que tenemos los humanos de habitar las ciudades y del colapso visual y espacial de estas.
“Rockaway” de Katharina Grosse
Katharina Grosse es una artista alemana que fue convocada por el gobierno para intervenir una vieja construcción que había sido destruida por el paso, el terrible paso, del huracán que fue apodado Sandy. Esta vieja construcción que recibió el nombre de “Rockaway” se erige en la playa abandonada, pero luego de la intervención de esta artista, quedó sumergida en una fina sucesión de colores entre los colorados, anaranjados y blancos. Tanto desde el interior como en el exterior, y aun a metros de distancia de la casa, hay como una marea de colores uniformes en la que uno queda suspendido y sumergido. Alusivo, contextual, conceptual y atrapante. Una obra simbólica y única de esta artista.
Las instalaciones artísticas brindan la posibilidad de apreciar lo simbólico, lo artístico, lo plástico, el diseño y también la estética. Brindan la posibilidad de experimentar y sumergirse en la experiencia. El arte en este caso muta a favor de la persona que la observa y la vive.