Obras de la vida cotidiana del siglo XX
Joaquín Sorolla es uno de los más grandes y conmovedores pintores impresionistas. Su capacidad de reflejar los cambios lumínicos en los paisajes hizo que su impresionismo llegara un paso más allá. Es por este motivo que a su estilo impresionista se lo conoce como luminismo. El luminismo de Joaquín Sorolla. A través de sus pinceladas y uso del color y la luz reflejó conmovedoras escenas de la vida cotidiana al natural y en la naturaleza. Pero también su pintura no dejó de mostrar un lado especial y de denunciar cuestiones de su época que le preocupaban y disgustaba.
Joaquín Sorolla
Joaquín Sorolla fue un valenciano nacido en el año 1863 y murió en el año 1923. Huérfano desde joven y criado por familiares, mostró de pequeño el mismo don artístico que desplegó siempre. Si bien su camino hacia el reconocimiento artístico fue sinuoso, no tardó en llegar. Y su producción artística se encuentra entre una de las más prolíferas de la historia, realizando miles de obras de arte.
Su estilo
El estilo de Joaquín Sorolla recibe el nombre de luminismo. Es un estilo que fue desarrollando con el tiempo, pero cuando llegó el 1900 Joaquín, radicado en Madrid junto a su mujer e hijos, era un aclamado pintor en este estilo. Estilo, además, que no abandonaría jamás.
El lado iluminado: “Paseo por la playa”
En la parte más costumbrista y realista de Sorolla, se encontraron hermosísimas escenas de la vida cotidiana de finales y principios de siglo. En “Paseo por la playa” se observa a dos mujeres vestidas en elegantes vestidos blancos. Iluminados por la luz del sol, y el reflejo del agua, esta escena transmite mucha armonía, luz y paz. Ambas llevan grandes sombreros con ellas, algún que otro tul y una de ellas un gran sombrero para proteger su blanca piel del sol. Es importante remarcar en esta obra la facilidad con la que el artista, a partir de los trazos ligeros logra expresar los cambios de luz, los momentos del día y el viento. Una bellísima obra. Otra obra famosa en relación con esto es la “Pesca de Atún”. En esta pintura se observa una escena muy típica de la España de aquel entonces. Hombres recolectando en un día ajetreado la pesca de atún sobre un gran puerto. Esta obra del 1909 en realidad se llama “Ayamonte” pero se la conoce como la pesca del atún.
El lado más difícil del realismo social: “Trata de blancas”
Joaquín Sorolla se preocupó por representar temas sensibles de su época. Una de sus más famosas pinturas en relación con esto es: “Trata de blancas”. Se trata de un óleo sobre lienzo que se encuentra expuesto en el Museo de Joaquín Sorolla en Madrid. Esta obra es una de las tantas en las que el artista describe situaciones o males de su época, a modo de denuncia. La trata de blancas era una de ellas. Aquí se muestra a un grupo de mujeres. En el marco de un realismo social que también lo caracterizó, muestra a cinco mujeres con pañuelos en la cabeza víctimas de trata de blancas. Con vestidos sencillos acorde a su época, se las ve con los ojos cerrados, con semblantes cansados y en algunas demacrados. De diferentes edades, las mujeres yacen las unas sobre otras entre sus pocas posesiones y valijas. Parecen ocupar el vagón de un tren que las lleva a su peor destino.
Joaquín Sorolla llevó al impresionismo a un lugar muy especial y único. Su manejo de la luz fue superador y su retrato de la España de aquella época también.