Azul, rosa y negro y otras etapas en una vida pictórica cambiante y única
Pablo Picasso fue el pintor español más famoso de todos los tiempos. Malagueño, nacido en el año 1880, su primera palabra fue “Piz” por lápiz lo que muestra que el dibujo es parte de su identidad desde pequeño. Su obra pasó por muchas etapas: realista, etapa rosa, etapa azul, etapa negra, el cubismo, el expresionismo y otras más. En todas como desde siempre, este artista se destacó mostrando una pericia para el arte única, y una originalidad que no dudaba en manifestar, más allá de las críticas que podrían presentarse en su época, como cuando presentó sus primeras pinturas cubistas con las “señoritas de Aviñón”. Picasso un emblema del arte, del cambio y de la creatividad, autor de grandes e icónicas obras que merecen ser recorridas.
Azul
El período azul (1901-1904) es un periodo en el que las pinturas de Pablo Picasso tenían una tonalidad azul. Color que refiere a la tristeza y en la que reflejaba a personas en situaciones de vulnerabilidad y desamparo como ciegos, lisiados, mendigos y enfermos, que tendía a representar de modo pálido y con figuras y rostros flacos y alargados. De este período se destacan obras como: “Desnudo en azul” y “el goloso”.
Rosa
Antes de describir esta etapa tan suya, cabe destacar que, en la primera etapa de Pablo Picasso, cuando era joven y estudiaba, su afán fue mantenerse realista. Que su pintura reflejara la realidad lo mejor posible. Era tan talentoso que ya a los 15 años tenía su propio taller y recibía encargos de todo tipo, a los que respondía con una velocidad única. Pero en la etapa rosa, que fue posterior cronológicamente a la azul, el tinte cambió y todo se volvió, como lo dice su nombre, rosado. Actores, arlequines y acróbatas entre otros temas fueron cobrando protagonismo volviendo a su pintura más alegre, fresca y jovial. “El actor”, “Comediante con niño” y “Maternidad” son obras nacidas en esta épica que concluyó en el año 1907.
Negro
Lo rosa se transformó en negro, y todo en su obra empezó a mutar enormemente, anticipando lo que luego sería el período cubista. Pasó a utilizar el color negro preponderantemente y mostrar una fuerte influencia del arte africano. Con máscaras alargadas y geométricas. De aquí mutó al cubismo y su obra ya no fue la de siempre, aunque Pablo Picasso nunca dejó de explorar. Nunca le fue un tema cambiar de un estilo a otro.
Cubismo
El cubismo fue lógicamente un período de quiebre en la obra de Pablo Picasso. Ya instalado en París Pablo Picasso entabló una fuerte amistad y vida artística en común con Georges Braque, con quien desarrolló el cubismo. El movimiento cubista como tal presentaba figuras fragmentadas que se conformaban por formas geométricas como cuadrados, rectángulos y triángulos. El uso de la perspectiva fue uno de sus acentos más particulares siendo una figura representada desde diversas perspectivas al mismo tiempo. La primera obra de este estilo fue las “Señoritas de Aviñón” la cual generó un gran revuelo en la crítica y público en general, logrando amantes y críticos por doquier. Esta obra fue realizada cuando Pablo Picasso tenía apenas 26 años.
Expresionismo
Pero el cubismo no fue el cierre de la obra de Pablo Picasso, quien siguió explorando como con el expresionismo, etapa a la que corresponde su obra el Guernica, obra emblemática si las hay. Obra que muestra el trágico bombardeo que recibió este pueblo en la guerra civil española y que conjuga elementos cubistas y expresionistas.
Revolucionario, único y cambiante, Pablo Picasso fue uno de los mayores artistas de todo el siglo XX.
